Inspiração

Piscina Verde Esmeralda: sofisticación y frescura en armonía con la naturaleza

Un excelente ejemplo de inspiración en la cuarcita Verde Esmeralda se aprecia en este proyecto exterior, desarrollado por el arquitecto Vangii Guerra y la empresa de mármol Margran PI, con piedra de Decolores.
 

La piscina revestida en Verde Esmeralda aportó un toque de sofisticación y frescura al ambiente, creando un espacio de ocio y relajación que evoca la naturaleza y el concepto de verde biofílico. El vibrante color de la cuarcita creó una apariencia impactante que hizo que la piscina se destacara como el centro del espacio.


Originaria de Brasil, la cuarcita verde esmeralda es famosa por su durabilidad y estética refinada, características que Lo hacen ideal para exteriores, como piscinas y fachadas.


Su vibrante color verde se debe a la presencia de minerales que forman una paleta de tonos que va desde el verde esmeralda hasta el más suave, creando un fascinante juego de luces y sombras.


Armonía entre tonos verdes y neutros


El contraste entre el verde intenso de la piedra y los tonos neutros del entorno del proyecto resultó en una composición visual de tranquilidad.


La elección del Verde Esmeralda se concibió para crear una atmósfera única, donde el verde de la piedra evoca la naturaleza y armoniza con el diseño moderno. El proyecto también incorporó elementos como plantas y cocoteros, que aportaron un toque natural y sereno al ambiente.


Reflejos y luminosidad


El acabado pulido del Verde Esmeralda reflejaba la luz del sol de forma deslumbrante. Durante el día, la superficie de la piscina se ilumina con un brillo natural, aportando un aspecto vibrante y refrescante. Por la noche, el espacio se transforma en un lugar acogedor, creando una atmósfera acogedora.
 

Este proyecto ejemplificó cómo el Verde Esmeralda se integra perfectamente en entornos que buscan altos estándares. Sin duda, la piedra natural para piscinas es un elemento contundente que realza el diseño, añade valor y durabilidad a los espacios.
 

Fotos: Colección Margran PI